jueves, 9 de noviembre de 2017

Pérdida de tiempo

Ya pasó el Día de Muertos, atrás quedaron esos panditas… ¡Ups! Digo, calaveritas que la chaviza se disfrazaba para conmemorar a los difuntos, pero, que yo sepa Ace Frehley y Peter Criss de Kiss aún no mueren, ¿entonces por qué muchos se maquillaron como ellos ese día? Aprovechando el archirequetemegapuente, acudí a equis sala de cine a ver esa película animada que nos restriega en la cara la capacidad imaginativa de los gringos al reciclar nuestras tradiciones y folklor, o sea, nos asombraron al exhibirnos algo que para nosotros de tan común que era ni en cuenta, pues lo tomábamos de ordinario que pasaba inadvertido.

Hablando de momentos inadvertidos, cierta vez una colega laboral con el clásico sarcasmo de nuestra profesión me dijo: ¡oyes! Tu que escribes sobre las tonterías de la vida – ¡qué! ¿Cómo? “#@!%’¡#&–, nunca te has puesto a pensar en el valioso tiempo que perdemos entre la duración del cambio del semáforo de rojo a verde, casi llega al minuto y medio, los cuales si los sumas con todos los que te cruzas al día y los multiplicas por los meses, al año son un titipuchal de momentos de la vida que te pierdes en la lela, es decir, vas desperdiciando la vida en cada luz roja.

Creo que el tiempo nunca se pierde si en esos momentos lo utilizamos para pensar, no en divagar sobre la inmortalidad del cangrejo, sino en colocar en los pensamientos asuntos que se analicen con atención y detenimiento, generando puntos de vistas que permitan tomar decisiones acertadas a esos asuntos. Recuerde que cuando uno viaja ya sea en camión, taxi o coche particular, las cosas se miran distintas, pues las perspectivas cambian, las broncas que nos parecen grandes, tomando un poquito de distancia ya sea en espacio o en el tiempo ese que según usted se pierde en cada cambio de luz, se ven diferentes.

¡Ah! Regresando al tema de la película, apreciado lector, si dudaste de mi insensibilidad al ver la cinta, honestamente, sí lloré, pero no de ternura, sino de enfado, porque ahora para el mundo ser mexicano es festejar el dos de noviembre perdiéndose en el laberinto del tiempo y el olvido otras manifestaciones populares de nuest

No hay comentarios: