jueves, 5 de julio de 2018

¡Dispénsame por ser ciclista!

Para los amantes de experimentar la adrenalina, recomiendo el deporte extremo más salvaje, riesgoso e incluso hasta puedes quedar en el intento, es decir, absténganse cardiacos de practicarlo. Me refiero a ser ciclista en la ciudad, eso de pedalear la vida entre tanto conductor suicida del tráfico kamikaze en avenidas y calles principales, ser ante los ojos del chofer un estorbo vial o llegar a convertirte en un tope como algunos consideran también a los peatones.

Escribo esto con la experiencia que da el fracaso de llegar a creer que la bicicleta es un medio de transporte más en la selva de concreto, incluso a veces pienso que eso de que en países de primer mundo la bicla se emplea más que los carros es una falacia, en fin, hay que darle delete al cerebro a tal sueño guajiro, pues estos ojitos que se han de comer los gusanos, han visto a ciclistas ser arrollados e incluso aprovecho este medio para darle las gracias a diosito por las veces que me ha librado, para después escuchar de quien casi me atropella: ¡hazte a un lado pendejo!

Rifársela entre las refrescadas de madre de automovilistas que siempre llevan prisa, esquivar coches cuyos incautos conductores creen que la ciclovía es un tercer carril; en la desesperación por circular subirse a la banqueta para evitar tal ajetreo, enseguida de hacerlo recibir insultos de transeúntes, entre otras estupideces por la insensata idea de querer combinar el ejercicio físico con el medio de transporte y ahorrarme una lana de mensualidad en el gym, cual especie de spinning urbano.

Cansado de oír a los chóferes victimizarse ante quienes les entorpecemos su movimiento, que los agentes de vialidad se hagan de la vista chiquita cuando estamos a punto de perecer porque no respetan nuestro espacio en las calles todos esos gandallas que van detrás de un volante e intentando a la vez evitar recurrir a la violencia verbal y física, simplemente responderé a sus insultos y salivazos con: ¡dispénsame por ser ciclista!.

No hay comentarios: